Su veterinario podrá darle instrucciones específicas para su situación, así que por favor asegúrese de sentarse con él y discutir todas y cada una de las preocupaciones que tenga sobre esta cirugía.
Nunca he tenido un gato que haya necesitado una cirugía intestinal, pero sí tuvimos un gato al que le repararon una hernia de hiato (su estómago se estaba moviendo hacia el esófago), y más tarde le colocaron una sonda de alimentación gástrica (el extremo se colocó en su estómago, pasando por alto el esófago, donde se colocan la mayoría de las sondas de alimentación para felinos), así que estoy familiarizado con algunos tipos de cirugía gástrica.
Lo más importante que hay que recordar de esta cirugía es que es CIRUGÍA MAYOR. Su gato tardará en recuperarse.
Si su gato está tomando medicamentos para el dolor, es probable que empiece a sentirse mejor antes de que mejore, por lo que debe ser confinado y no se le debe permitir saltar hasta que las suturas se curen. Teníamos a nuestro gato en un pequeño baño, pero no era naturalmente un trepador. Si su gato normalmente se trepa al inodoro, lavabo, etc., debe confinarlo en una gran jaula para perros, habitación o gran armario sin ningún tipo de muebles. Su veterinario le indicará cuánto tiempo debe durar el confinamiento.
No recuerdo haberle dado a nuestro gato comida especial después de la cirugía, pero tenía tantas alergias que sus opciones de comida ya eran bastante limitadas. El veterinario le dará un gran número de medicamentos para asegurar que el sistema gastrointestinal vuelva a funcionar correctamente, así que asegúrese de administrarlos de acuerdo con su horario (tuvimos que llevar un calendario porque parecía que todo estaba en un horario diferente).
La buena noticia es que si todo va bien, su gato debería volver a la normalidad en unas pocas semanas. Existe el riesgo de que se produzcan complicaciones (como en cualquier cirugía, incluso en algo rutinario como una limpieza dental), y su veterinario debería comentar estos riesgos con usted.